Nunca es demasiado tarde para crecer en nuestra relación con Cristo. A través de los Talleres de Oración y Vida, o Talleres de Oración y Vida (TOV), podemos explorar todas las formas en que la oración puede transformar nuestra forma de pensar, orar y vivir. Al asistir a un taller de 15 sesiones, que lleva a los participantes a través de varias tradiciones de oración, podemos entrar en una experiencia más profunda y amorosa con Dios.
“Los Talleres de Oración y Vida son una nueva forma de evangelización, más viva y con una visión más positiva de lo que siempre hemos conocido,” dice Paula Cáceres, guía de talleres y Coordinadora Nacional Noroeste de TOV. “En nuestros talleres aprendemos trabajando y trabajamos aprendiendo. De la misma manera, aprendemos a orar orando. Los talleres son una forma de liberarnos y sanarnos a través del conocimiento de Dios, una transformación a la luz de la Palabra y la promoción de los valores del Evangelio y los sacramentos.”
Talleres de Oración y Vida fue fundado por el P. Ignacio Larrañaga en 1984. Con el tiempo, su misión se ha expandido a más de 40 países como ministerio diocesano. Paula se involucró por primera vez en 2008, cuando asistió a su primer taller como una forma de profundizar su vida de oración. Después de dos años de formación a través del programa, se le pidió que ayudara a establecer el ministerio aquí en la Diócesis de Sacramento. Hoy, la diócesis tiene 26 guías que dirigen talleres en las parroquias de la diócesis.
“Organizamos talleres en inglés y español para adultos y adultos jóvenes, y talleres adicionales en español para adolescentes, niños y parejas casadas,” dice Paula. “También organizamos charlas y retiros de un día y de fin de semana. En la Catedral tuvimos una guía, Virginia Aguilar, ofreciendo talleres, charlas y retiros desde muchos años antes de la pandemia. Después de la pandemia, poco a poco estamos volviendo a ofrecer talleres en todas las parroquias de la diócesis. Esperamos traer pronto un taller a la Catedral.”
El ministerio divide cada año en dos semestres y comienza todos los talleres en la diócesis al mismo tiempo, ya sea la última semana de enero o la primera semana de febrero, y la última semana de julio o la primera semana de agosto.
“El programa se lleva a cabo en 15 sesiones, una vez a la semana durante dos horas,” dice Paula. “Esto culmina en un retiro de cuatro horas en una casa de retiro o parque. Un guía conduce cada sesión utilizando un manual, así como algunas grabaciones de nuestro fundador que se relacionan con el tema central de cada sesión. Durante cada sesión, aprendemos y practicamos una nueva forma de oración. A lo largo de la semana entre sesiones, los participantes practican esa forma de oración durante 30 minutos cada día y también leen un pasaje de las Escrituras elegido para cada día.”
Al asistir a estos talleres, los participantes pueden enriquecer sus vidas espirituales y crecer juntos con sus familias y la comunidad parroquial. Al crecer en nuestra relación con Cristo, podemos impactar positivamente a todos los que nos rodean.
“El eje central de nuestros talleres es la oración personal y diaria con el abandono, una combinación liberadora con profundos frutos espirituales,” dice Paula. “Después de nuestros talleres, vemos a muchos católicos regresar a los sacramentos y descubrir vocaciones para diferentes ministerios. Al conocer a Jesús, también nos acercamos más en amor a nuestros hermanos y hermanas en Cristo, especialmente cuando nos preguntamos: ‘¿Qué haría Jesús?›
“Los talleres contribuyen a la unidad y fortalecimiento tanto del individuo como de la familia, haciendo de la Iglesia y de la comunidad un lugar mejor”, agrega. “El ministerio ayuda a sus participantes a crecer espiritualmente a través del encuentro con Jesús en la oración personal, necesaria para todo cristiano y verdadero servidor.”
Para más información sobre los Talleres de Oración y Vida, comuníquese con Paula Cáceres a paulac.tov@gmail.com o encuentro.tov@gmail.com.